[...]
Luego de pasar un largo rato en la fiesta, Ella se duerme sobre el sillón del living. El la ve descansando, pero decide llevarla a una habitación para que descanse sin los ruidos. Una vez que llegan y logra recostarla tranquilamente, El se sienta en un extremo de la cama y la mira mientras duerme.
El: Aunque sea solo yo, sé que vos sos la persona con la que estoy destinado a pasar el resto de mis días.
La tapa con una frasada , abre la puerta y antes de irse la mira cuidadosamente.
El: Me duele en el alma hacer esto, pero por nuestro bien; adiós.
Sale de la habitación y cierra la puerta. Luego de unos segundos, Ella abre los ojos lentamente, se reincorpora y mira a su alrededor, con una mirada vacía, como si le faltara algo que ya no la podría completar.
Fin.
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1 comentario:
leo esto y entiendo que te voy a querer para siempre
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